
En las salas blancas, los parámetros del aire deben ser regulados y controlados las 24 horas del día. En Sauermann, ponemos toda nuestra experiencia al servicio del desarrollo de instrumentos de medición de primera calidad que ponen el listón muy alto en cuanto a fiabilidad, precisión y durabilidad.
Este tipo de aplicación requiere transmisores multifunción, o transmisores especialmente diseñados para medir un parámetro específico.
El sistema de supervisión constante está vinculado a la regulación en tiempo real del sistema de ventilación a través de una red de instrumentos, que a su vez están conectados a un sistema de control y adquisición de datos (SCADA).
Esta arquitectura interconectada, conocida como Building Automation, constituye el núcleo de los sistemas de gestión de edificios (en
aplicaciones comerciales) o de los sistemas de gestión técnica centralizada (en instalaciones industriales), sistemas de automatización que también optimizan el uso energético del edificio mediante el análisis de los datos recogidos por nuestros instrumentos de medición.
Por ello, los transmisores de Sauermann son abiertos por diseño, lo que significa que tienen salidas estándar, tanto analógicas como digitales. Además, nuestros transmisores ofrecen la máxima flexibilidad en cuanto a topología, estructura y configuración del sistema de
gestión de edificios. El objetivo es monitorizar los parámetros de calidad del aire de forma ininterrumpida y durante las 24 horas del día, para lograr una gestión impecable de la calidad del aire interior y apoyar el mantenimiento preventivo del sistema de ventilación.
Transmisores multifunción
Transmisores multifunción
Los transmisores multifunción de Sauermann son los instrumentos más avanzados de su clase en nuestra gama, y la opción preferida para la supervisión permanente de entornos de salas limpias.
Estos instrumentos se han diseñado pensando en un funcionamiento impecable y permanente, dejando atrás al resto del mercado en lo que respecta a la medición precisa y fiable de una amplia gama de parámetros del aire, incluido uno de los parámetros más importantes para los profesionales en entornos regulados: la presión diferencial.
Estos transmisores también pueden alojar sondas adicionales para medir y mostrar hasta cuatro parámetros simultáneamente (presión, temperatura/humedad, velocidad del aire, flujo de aire y concentración de CO/CO2/COV).
Si-C320
Para salas blancas, ambientes controlados y aplicaciones industriales HVAC que precisan una regulación y una
monitorización perfecta de los parámetros del aire, nuestros transmisores Si-C320 ofrecen mediciones fiables y garantizan la conformidad con las normativas más estrictas.
La carcasa de los Si-C320 es estanca, reforzada y resistente al peróxido de hidrógeno vaporizado (VHP). Asimismo, integra una pantalla táctil en color que permite una visualización completa y un control avanzado de los parámetros de medición.
Además, las mediciones se pueden registrar y descargar a través de la aplicación/software Sauermann Control.
Si-CPE320
En las salas blancas, el transmisor Si-CPE320 puede panelarse para minimizar el impacto en el entorno de trabajo. Dispone de un frontal estanco de acero inoxidable de alta calidad, con una pantalla táctil en color integrada.
Equipada con las mismas tecnologías que el Si-C320, esta versión panelable aporta una fiabilidad y una exactitud punteras.
Además, las mediciones se pueden registrar y descargar a través de la aplicación/software Sauermann Control.
Si-CPE320: Módulo de comunicación inalámbrica opcional
Si-CPE320-W: Módulo de comunicación inalámbrica integrado

Presión
Presión
La medición de la presión es especialmente importante para regular la presión dinámica del aire entrante y supervisar los filtros de aire, que se obstruyen a diferentes velocidades en función de su eficacia de filtrado
Los manómetros de presión diferencial también controlan la presión del lado alto y del lado bajo en las salas de producción. Las mediciones de la presión diferencial en las salas críticas son cruciales para mantener la bajísima concentración de partículas en el aire. Estas mediciones son utilizadas por los sistemas de regulación para gestionar eficazmente la ventilación en cada área. Nuestros transmisores de presión diferencial son famosos por su excelente rendimiento.
Los transmisores empotrables también controlan el confinamiento específico de cada zona para evitar la contaminación atmosférica en la producción farmacéutica y los entornos hospitalarios.
Aprovechando su larga experiencia en instrumentos de medición de presión, las soluciones de Sauermann -transmisores conectados y manómetros de columna líquida- cubren todas las aplicaciones. Nuestros transmisores son ideales para registrar valores a distancia y a lo largo del tiempo. Nuestros manómetros de columna líquida son inigualables en cuanto a durabilidad y funcionan sin alimentación eléctrica, lo que los hace excepcionalmente resistentes.
Temperatura y la humedad
Temperatura y la humedad
Según la norma ISO 14644-3, el sistema de ventilación de una sala limpia debe ser capaz de mantener los valores de temperatura y humedad dentro de los límites específicos del funcionamiento. Estas normas están diseñadas para evitar problemas comunes como la expansión o contracción de los materiales, la propagación de patógenos y la corrosión.
Todos los transmisores de temperatura Sauermann miden la humedad relativa. Se utilizan en todas las aplicaciones, y son especialmente populares en la industria farmacéutica, donde las zonas de producción a menudo tienen que cumplir con estrictas normas ambientales por razones de conservación del producto.
Estos transmisores también pueden encontrarse en zonas de almacenamiento y embalaje en el sector sanitario, de alta tecnología y otros sectores de fabricación críticos.
La velocidad del aire y flujo de aire
La velocidad del aire y flujo de aire
El flujo de aire a través de las entradas y salidas debe controlarse con precisión para mantener una tasa de cambio de aire suficiente dentro de las diferentes zonas de un complejo de salas blancas. El cumplimiento de este estricto requisito se hace aún más difícil cuando el aire interior se purifica mediante filtros que capturan bacterias, virus y otras partículas transportadas por el aire. Estos filtros interrumpen el flujo de aire, creando potencialmente turbulencias o reduciendo los caudales.
Las salas limpias de las clases ISO más estrictas (1-5) deben tener un flujo de aire laminar libre de turbulencias que optimice el flujo de aire.libre de turbulencias que optimice la circulación y el cambio de aire, a la vez que mantenga la presión a un nivel lo suficientemente estable como para mantenerla por encima o por debajo de la presión atmosférica. Controlar el sistema de ventilación para asegurarse de que está perfectamente equilibrado significa medir los flujos de aire las 24 horas del día.