Por tanto, resulta esencial controlar las zonas de tratamiento, acondicionamiento y almacenamiento sobre la base de un estricto respeto de las normas y reglamentos en vigor.

De este modo, en los centros de producción, algunas zonas requieren una vigilancia constante de los parámetros de presión y temperatura. De ello depende la salud de las personas, que generalmente sólo puede garantizarse mediante un escrupuloso protocolo de almacenamiento de los medicamentos.

Esta vigilancia implica un seguimiento de los cambios de presión y/o temperatura, que pueden tener un notable impacto en la calidad y la eficacia de los productos.

En Italia, la división local de Kimo Instruments, marca del Grupo Sauermann, recientemente ha equipado la sociedad Ibsa Farmaceutici, con sede en Lodi, con 70 sensores CP 210 BNR y CP 211 BNR en el conjunto de sus establecimientos, incluso en entornos que utilizan flujo de aire laminar.

Estos instrumentos, que miden la velocidad, el caudal y la presión del aire, son ideales para aplicaciones en la industria, en especial en la industria farmacéutica.

En el caso que nos ocupa, nuestros sensores garantizan el almacenamiento en buenas condiciones de jeringuillas y viales en medio aséptico.

Hoy más que nunca, el nombre del Grupo Sauermann es el de un socio de confianza para los sectores de las tecnologías médicas y de la industria farmacéutica.